El placer de viajar. La paz. La ausencia de relojes. La fuerza del tiempo. La certeza del movimiento, del camino y el juego. La confianza y la experiencia de que cuando más recorremos es cuando vivimos despiertos y cuando viajamos quietos.
Un espacio de reflexión que incluye opiniones, pensamientos, reflexiones, certezas y creencias que no tienen por qué ser ciertas, pero que son mías. Soy misionero. Soy cura. Intento creer...