Nada me ha enseñado más en la vida que guardar silencio ante la muerte joven. Ni pésames ni protocolos. Tan sólo amar en la noche. Te quiero Kiko. Sufrimos tu partida. No sufras tú nuestra pena. Al final, nos quedará tu sonrisa. "Kiko, como familiarmente le llamábamos, había nacido el 25 de septiembre de 1985 en Shanxi, China. Tenía, por tanto, 27 años. Era el menor de cuatro hermanos. Se preparaba con ilusión para emitir su primera profesión en septiembre. Pidamos al Señor y al Corazón de María por su eterno descanso y pidamos también, de manera especial, por sus padres y hermanos en estos momentos de dolor, acrecentado por la lejanía."
Un espacio de reflexión que incluye opiniones, pensamientos, reflexiones, certezas y creencias que no tienen por qué ser ciertas, pero que son mías. Soy misionero. Soy cura. Intento creer...